La relación entre códigos de buen gobierno corporativo y códigos
éticos: una cuestión (relativamente) abierta

La relación que media entre los códigos de buen gobierno corporativo (CBGC) y los códigos
éticos (CE) ha venido siendo analizada por juristas y economistas desde hace al menos
una década. A pesar de que el tiempo transcurrido podría hacer pensar que ya se ha alcanzado
una conclusión unívoca, lo cierto es que no es así. Sólo parece haber consenso en dos
aspectos: el carácter esencialmente voluntario que debe impregnar tanto los CBGC como
los CE, y que en ambos casos va más allá de lo exigido por las leyes. En todo lo demás,
persisten dos líneas de pensamiento, claramente diferenciadas. La primera (y seguramente
más generalizada) afirma, por un lado, que CBGC y CE se ocupan de cosas distintas y,
por el otro, que los CE -aun siendo voluntarios- constituyen un imperativo moral. Por el
contrario, la segunda línea de pensamiento, quizás mejor y más seriamente fundamentada
sostiene, por una parte, que CBGC y CE son tan sólo manifestaciones de una misma idea,
preocupación o interés y, por la otra, que en modo alguno los CE constituyen un imperativo
moral. Estos son los argumentos que esgrimen unos y otros:
No hay comentarios:
Publicar un comentario